La electroestimulación es una técnica muy utilizada en fisioterapia y adquiere gran protagonismo en los tratamientos de suelo pélvico. Consiste en la aplicación de una corriente eléctrica no dolorosa que imita a la que emiten los nervios del cuerpo, sobre una zona determinada provocando la contracción del músculo tratado.
También aumenta la propiocepción (el registro que se tiene de esa musculatura) que muchas veces se encuentra afectado cuando esta se encuentra debilitada.
Por otra parte, tiene efectos de electroanalgesia, por lo que resulta ideal para tratamiento de síndromes dolorosos y en el post parto.
De esta manera, los efectos más destacados son:
- Mejora el tono de la musculatura
- Aumenta el flujo sanguíneo a la zona
- Aumenta la propiocepción
- Alivia el dolor de la zona tratada